Antecedentes

Está bien documentado que el uso y el uso excesivo de medicamentos, y especialmente de antimicrobianos, tanto en la población humana como en la de animales ha aumentado a nivel mundial. Combinado con el tratamiento y la separación inadecuados de los desechos y las corrientes de aguas residuales, esto está facilitando la propagación de cepas de bacterias resistentes a los medicamentos en el agua potable, las fuentes de alimentos y el ecosistema en general; afectando directamente la salud de los seres humanos y la supervivencia de otras especies.

La resistencia a los antimicrobianos (RAM) tiene lugar cuando se producen cambios genéticos en microorganismos como bacterias, virus, hongos y parásitos. Esto puede hacer que los medicamentos y antisépticos sean ineficaces contra diversas infecciones.